Como no decir gracias

Soy una persona que desde ni~na se me ense~no lo basico en modales cristianos. El buen comportamiento de hija de pastor era essencial para  mi padre adoptivo. El  tomaba las cosas de Dios muy en serio, en especial como el decia: "  es casa de Dios ". No recuerdo haberle dicho de " tu ", el era un adulto y mi papa por supuesto. El respeto era a diario como el comer y respirar . Aunque era hija adoptiva, me quizo como su hija  , por lo tanto me instruyo como todo un padre cristiano.Hay tantos recuerdos  de mi ni~nez y adolesencia entre padre e hija en mi memoria. Siendo hija unica, el se tomo el tiempo para jugar conmigo a la pelota , o llevarme al parque. Su agenda siempre estuvo muy llena de compromisos con la iglesia, pero no lo detuvo para hacer " un padre" para mi .En cada oportunida que tenia , me ense~naba alguna leccion de fe y fidelidad a Dios y la vida diaria. Oraba conmigo y por mi cuando estuve enferma, siendo esa la razon por la que mi fe naciera. Yo era su primera miembra de la iglesia a la que se le predicaba en casa, en la calle o dondequiera que estuvieramos.Lllegue a amar la casa de Dios por lo que vi en el. No fueron simples palabras su gran amor a las cosas de Dios, mas bien fue  su vida ejemplar,, vivida. Lo admire como padre, siervo de Dios y ser humano tanto como por la gracia de Dios que habia en el. Mis padres adoptivos no pudiendo tener hijos, se comprometieron en adoptar cerca de casa, con familiares. Mi padre adoptivo me quize desde el primer momento que me vio.  Tenia yo apenas tres  a~nos  de edad , pero con un corazon hambriento de cari~no. Mi padre biologico no servia a Dios en ese tiempo y se ausentaba del hogar  por dias, causandole a mi madre tristeza y dolor. Cuando mis padres adoptivos le sujerieron a mi padre que me dieran con ellos , el consintio sin pensarlo . Yo me senti rechazado por varios a~nos, hasta que ya adulta entendi que Dios asi lo habia dispuesto. Nacida en un ambiente no tanto cristiano, me fui a vivir a otro pais con dos personas que amaban y servian a Dios ! Mis padres adoptivos me quisieron como nadie lo hubiera hecho. Me crie en un ambiente sano, rodeada de gente que inmediatamente me quizo.Mi padre antes de ser pastor fue papa dulce, tierno con un corazon de oro, fue mi primer maestro en casa. El que me ense~no a creer en Dios ,  a leer, escribir y a orar. Como no decirle " gracias  a Dios" por haber puesto a un hombre especial en mi camino.